Restaurada Imagen “Jesús de la Humildad y Paciencia”

En Catedral San José

Imagen “Jesús de la Humildad y Paciencia” fue presentada este domingo

  Luego de algunos meses de restauración en la ciudad de Valencia, por los destacados artistas venezolanos; Harry Schuster y Gustavo Zajac, nuevamente será exhibida y venerada en la Catedral San José de Puerto Cabello, la imagen “Jesús de la Humildad y Paciencia”, se trata de una escultura realizada en madera, muy antigua de un metro 30 centímetros de alto aproximadamente, la cual representa a un Cristo abatido sentado sobre una roca en actitud de cansancio, oración y reflexión, a la espera para ser clavado en la cruz.

El dramatismo de esta imagen queda reforzado a través de los acertados efectos naturalistas de su policromía, que llegan a alto grado de realismo en las heridas y contusiones de las rodillas y hombro y de la espalda flagelada. La santa imagen fue presentada y bendecida por Monseñor Saúl Figueroa, Obispo de la Diócesis de Puerto Cabello este domingo 3 de agosto a las 8:00 de la mañana, en la Catedral San José, al concluir la santa misa. El sacerdote Alexander Chacón, párroco de la Catedral, detalló que la restauración de esta imagen, junto a la de “Jesús Nazareno” -actualmente en reparación-, tiene un costo de 148 mil bolívares, de los cuales solo se han recaudado 100 mil, por lo que extendió el llamado a los porteños a colaborar, ya que se trata de imágenes de incalculable valor, además de ser patrimonio no solo de la Diócesis local, sino de la cultura porteña.

El padre Chacón precisó que a la escultura de “Jesús de la Humildad y Paciencia” se le realizo la recuperación de la pierna faltante, tallado de la base, aplicación de veneno contra polillas, limpieza de toda la superficie, arreglo de fractura en la pierna izquierda, así como descubrimiento de la pintura original, por lo que 90% de la capa de color que es la usada inicialmente. Monseñor Saúl Figueroa Albornoz, explicó que poco a poco se han venido reparando las imágenes veneradas en la Catedral San José; sin embargo, siguen haciendo falta más recursos para reparar la imagen de “Jesús Atado a la Columna”, por lo que invitó a la feligresía local a integrarse a esta iniciativa, ya que “no serán los entes gubernamentales los que recuperen este patrimonio”.

Su historia

Es todo un misterio como llego esta preciosa imagen a la ciudad, solo se sabe por referencias bien autorizadas que fue construida en Veracruz, México en el año 1733 y apareció en aguas porteñas en el año 1816, así lo relato Zony Cedeño colaborador de la Catedral San José, quien indico; “antes de la Toma de Puerto Cabello al mando del general José Antonio Páez, la Sagrada Imagen fue escondida o arrojada al Mangle en la parte Oriental de la ciudad, quizá por algunos piratas que no les intereso la imagen y así fue como el capitán Felipe Garcés al salir una mañana en una pequeña embarcación a recorrer el Mangle encontró dicha imagen sumergida casi en su totalidad, volvió a la población y dio aviso del hallazgo a la primera autoridad eclesiástica de esa época; Fray Antonio Perenal y junto a el regreso al sitio del suceso y se cercioraron que era la imagen de Jesús en el Paso de la Humildad y Paciencia que estaba sumergida en las aguas en el lugar más al Este de la calle que hoy llamamos Municipio”.

Cedeño conto que inmediatamente acudió gente al sitio para ayudar a sacar la imagen de las aguas en la esquina donde se cruzan hoy las calles Mangle y Colon, “hasta allí llegaban las aguas manglares en aquella época”, en el área se organizo una gran procesión llevando en hombros la imagen al templo parroquial (Iglesia El Rosario) escoltada por un piquete de Infantería de Marina y la Banda de Músicos de una fragata española. En el templo fue limpiada y bendecida y después de celebrarse la fiesta de Desagravio, la autoridad eclesiástica la entrego en depósito al Capitán Felipe Garcés progenitor de la familia Valbuena Garcés para que la custodiara y atendiera a su Fiesta todos los años el día Martes Santo. Desde ese día la imagen estuvo en poder de la familia Valbuena y su fe y tradición se transmitió de generación en generación recibiendo de los fieles un culto ininterrumpido, llegando este culto al más alto grado de esplendor y solemnidad. Actualmente la imagen se venera en la Catedral San José de nuestra ciudad.